Este sería el movimiento telúrico de mayor consideración desde 1999, cuando otro seísmo cobró la vida de 17.000 personas.
La cifra de muertos por el terremoto de magnitud 7,8 en la escala abierta de Richter registrado en el sur de Turquía, cerca de la frontera con Siria, se elevó a más de 650, según datos facilitados por las autoridades de ambos países y los Cascos Blancos.
El vicepresidente turco, Fuad Oktay, señaló que al menos 284 personas fallecieron y más de 2.300 resultaron heridas a causa del seísmo y aclaró que los datos corresponden al recuento de daños en diez provincias del país, según informó la agencia estatal turca de noticias, que agregó que “los daños son graves”. El movimiento telúrico tuvo su epicentro en el distrito de Pazarcik, situado en esa provincia.