Japón derrotó a Estados Unidos y se consagró como campeón del Clásico Mundial de Beisbol por tercera ocasión.
Japón derrotó 3-1 a Estados Unidos, se coronó como campeón de la tercera edición del Clásico Mundial de Beisbol en el Loan Depot Park de Miami, EE UU.
Con este título, los nipones consiguieron su tercer campeonato y son los máximos ganadores del Clásico Mundial de Beisbol. Además, el equipo japonés igualó el récord de República Dominicana al ser campeón invicto.
Estados Unidos quedó a un juego de conseguir su segundo título de forma consecutiva e igualar a Japón. Esta fue la primera final que perdió el Team USA en la historia del torneo.
El derecho Merrill Kelly fue el lanzador por Estados Unidos y el zurdo Shota Imanaga por Japón. Ambos lanzadores retiraron el primer inning sin problemas en un juego que se decidió por los grandes batazos.
Trea Turner, el campocorto jonronero de Estados Unidos, abrió el marcador en el segundo capítulo con un cuadrangular por el jardín izquierdo sin hombres en base.
Turner ha bateado al menos un jonrón en tres juegos consecutivos y llegó a cinco en el torneo para empatar el récord de Seung-Yeop Lee, quien conectó cinco por Corea del Sur en 2006.
En el noveno episodio, Shohei Ohtani, quien bateó de 3-1, llegó como cerrador para enfrentar a Jeff McNeil, Mookie Betts y Mike Trout, compañero de Ohtani en los Angels de Anaheim.
Mcneil se embasó por boleto, pero Betts bateó para doble play y Trout se ponchó ante los lanzamientos de Ohtani.
Con la victoria 3-2, Japón quedó campeón por tercera vez en el Clásico Mundial de Beisbol y amplió su dominio en el torneo.
